EL CARNAVAL EN LA MERIDA DE 1926
Eloi Chalbaud Cardona

Con extraordinaria pompa fue celebrado en esta ciudad el Carnaval 1926 y los festejos en honor al dios Momo revistieron especiales caracteres, reinando en todo el más completo orden. La sociedad y el pueblo de Mérida congregáronse durante las cuatro tardes de las carreras y se entregaron a las diversiones por las calles y plazas.
CORONACION DE LAS REINAS
A las 4 de la tarde del sábado se efectuó en el “Club Mérida” el simpático acto de coronación de la Reina del Carnaval, señorita Lola Ruiz y las Reinas de la Hermosura, la Belleza y la Simpatía, señoritas Juanita Spinetti, Carmen Gabaldón y María Teresa Lares.

CARRERA INAUGURAL
Alas 3 de la tarde, comenzó el desfile de las carrozas por la calle Independencia, hasta la Plaza Rangel, de donde regresó hasta  San Francisco para luego tomar la calle de Bolívar y regresar al punto de partida por la Federación. El ciudadano Presidente del Estado prestigió con su presencia este paseo.

LAS CARROZAS
Sus Magestades las Reinas iban en automóviles artística y bellamente adornados , acompañadas de sus Damas de Honor. Sobresalieron por su belleza y originalidad las carrozas en donde iban las comparsas “Las Emperatrices”, “Los Persas” y “Las Piratas”.

LOS BAILES
Durante las noches de los festejos el “Club Mérida” abrió sus salones para recibir a sus socios y sus familias y demás miembros de la sociedad merideña. La Junta Directiva obsequió a Sus Graciosas Majestades Doña Lola, Doña Juanita, Doña Carmen y Doña María Teresa y a sus Damas de Honor, con un suntuoso baile la noche del sábado. En la noche del lunes el Club abrió de nuevo sus salones y se efectuó un baile de máscaras. En estos actos, con su elegancia, su gracia, su cultura, la mujer merideña hizo derroche de su alto valor y en donde quiera dejó la nota de su esquisita y refinada espiritualidad.

CONCURSO DE DISFRACES INFANTILES
El domingo a las 10 de la mañana se efectuó en el “Club Mérida” el concurso de  disfraces infantiles, repartiéndose juguetes entre la chiquillería alegre y bulliciosa. También otorgó la Junta varios premios a los mejores disfraces.


(Tomado del Periódico de Intereses Generales “Juan Rodríguez Suárez”, en su edición del 2 de febrero de 1926 )