ORÍGENES DE LA NAVIDAD
Prof. Hermes Rumano
¿Sabe usted por que la Navidad se celebra el 25 de diciembre? En realidad, todo se debe a lo que yo llamo un tremendo “enredo histórico”. De hecho, es bien sabido que los primeros cristianos no celebraban la Natividad de Jesús y que la primera vez que esta fecha se festejó ¡fue más de trescientos años después del nacimiento de Jesús!
El enredo al cual quiero referirme comenzó durante el Siglo IV, cuando un grupo de eruditos de la Iglesia de Roma estudió los archivos oficiales y determinó que Jesús nació en diciembre de lo que ellos decidieron llamar el Año Cero. Sin embargo, poco después de haber hecho público el anuncio y modificado el calendario, se dieron cuenta que el cálculo original había tenido un error de cuatro años y que Jesús realmente nació durante el año 4 de nuestra era. Curiosamente, este error nunca fue corregido y, de haberlo sido, ¡este año en vez de ser el 2010 sería el 2006!
SOBRE EL 25 DE DICIEMBRE
En cuanto al día en que nació Jesús, los eruditos del siglo IV no consiguieron indicios sobre la fecha exacta. Y como no pudieron determinar el día exacto, entonces las autoridades de la Iglesia eligieron el 25 de diciembre porque ese día los romanos celebraban el «Nacimiento del Dios Sol» durante el arraigado «Carnaval Decembrino», antigua fiesta pagana que marcaba el final de la cosecha y el arribo del solsticio de invierno, en la cual ¡las oficinas públicas y los centros educativos de Roma cerraban sus puertas y la gente intercambiaba regalos, costumbre popularizada mucho antes del nacimiento de Jesús!
SOBRE EL PRIMER PESEBRE
El primer pesebre del mundo fue invención del religioso italiano San Francisco de Asís (1182-1226), quien presentó el primer nacimiento “viviente” del mundo en una pequeña localidad de Italia durante el siglo XII, es decir, hace ya casi nueve siglos. A partir de entonces, los cristianos comenzaron a adoptar la costumbre colocar en sus hogares cuadros o estatuillas de la Sagrada Familia en época de Navidad.
Esta costumbre, muy difundida entre los pueblos latinos y, en especial, en España, fue traída de ultramar por los primeros conquistadores. Hoy, cinco siglos después, la costumbre se mantiene viva en Mérida, donde ha pasado a formar parte de una de las más profundas tradiciones de nuestro pueblo. Lamentablemente esta vieja costumbre ha venido siendo sustituida por el árbol de Navidad, una costumbre originaria de Alemania, como veremos a continuación.
SOBRE EL ÁRBOL DE NAVIDAD
Fueron los germanos quienes adoptaron por primera vez la costumbre de adornar los árboles durante las fiestas decembrinas. Ellos comenzaron a utilizar el simbólico abeto alrededor del siglo XVII, es decir, hace unos cuatro siglos. Inicialmente, los adornos de los árboles de Navidad eran simples, hechos a manos o simplemente frutas silvestres amarradas a sus ramas.
Al ser introducida en otros países, esta costumbre sufrió diversas modificaciones. Por ejemplo, en Holanda, los árboles de Navidad fueron adornados con coronitas de azúcar conocidas como “Kerstkrans”
Con el paso del tiempo, sin embargo, los norteamericanos impusieron el uso de las “bolitas de navidad”, cuyo uso se ha extendido en el mundo entero. Esta costumbre norteamericana llegó a Venezuela durante el siglo pasado y, desde entonces, su uso se ha propagado a lo largo y ancho de nuestro país, especialmente durante los últimos tiempos.
SOBRE LA NAVIDAD VENEZOLANA
En Venezuela, la Navidad siempre ha estado ligada estrechamente a expresiones culturales y tradiciones “criollas”, como lo son los pesebres, los aguinaldos, las parrandas, las gaitas, los villancicos, las hallacas, el pan de jamón, el jamón planchado, el ponche crema y pare usted de contar.
Por desgracia, a medida que transcurren las décadas, las costumbres populares de nuestras fiestas decembrinas poco a poco han ido desapareciendo, siendo sustituidas por manifestaciones culturales extranjeras. Entre los cambios culturales más notables destaca la desaparición del “rito infantil” de recibir regalos del Niño Jesús, quien durante el último medio siglo ha sido progresivamente suplantado por el viejo San Nicolás, también conocido como Santa Claus o Papa Noel. Otro ejemplo, como ya antes mencioné, se aprecia a simple vista en muchos hogares en los que el tradicional Nacimiento o Pesebre ha sido definitivamente sustituido por el árbol de Navidad.
De cualquier manera, a pesar de la transculturización de la que hemos sido objeto y de los enredos históricos que dieron nacimiento a las fiestas decembrinas, la Navidad sigue siendo símbolo de paz y fraternidad en toda Venezuela. ¡Feliz Nochebuena! Y recuerde, si oye hablar sobre los orígenes de la Navidad , que yo, Hermes Rumano... ¡yo se lo dije!
